Cualquiera de las preguntas planteadas para esta entrada de blog es interesante pero voy a centrarme en las relacionadas sobre ciencia y el público en general.
Antes de hacer una pequeña reflexión sobre el tema, he consultado la encuesta de percepción social de la ciencia. Como dato significativo, me ha sorprendido gratamente cómo ha crecido el interés de la mujer por la ciencia entre 2014 y 2016, pasando de un 9.9% a un 13.7%. Por otro lado, como esperaba, la principal fuente de información científica de los ciudadanos es Internet (37.7%), sin embargo,es la televisión la fuente más consultada cuando los ciudadanos citan tres medios para estar informados sobre ciencia. Dentro de Internet, son las redes sociales la fuente más consultada (43.6%), y dentro de ellas es Facebook la más utilizada (40.9%).
Con estos datos de referencia quiero hacer mi reflexión. Como era de esperar, Internet es la principal fuente de información científica, pues es la más rápida de manejar y en ella puedes acceder a contenido de cualquier sitio del mundo de forma instantánea. Creo que gracias Internet, la divulgación científica es mucho más sencilla y los ciudadanos tienen mejor acceso a la información. Sin embargo, también creo que esto conlleva un problema. ¿Cómo saber cuando lo que leemos es fiable o no? En Internet, estamos constantemente expuestos a noticias, imágenes o datos. Dependiendo de dónde busquemos la información el enfoque puede ser uno u otro. Por eso, cuando leemos información científica también es complicado saber si realmente la fuente es fiable o hay algún interés oculto. ¿Es Internet entonces contraproducente para la divulgación científica? Por supuesto que no. Me posiciono totalmente a favor, pero si que creo que se debería formar un poco más al ciudadano y dar indicios de cuándo una fuente es fiable o no lo es. Además, creo que también se debería de controlar más el contenido publicado en la red, parece que todo es publicable en Internet, que todo vale, ¿por qué no endurecer las medidas de divulgar online?
Y paso de Internet a la televisión. Si me preocupaba algo Internet, creo que lo hace más la televisión. ¿Por qué? Cuando a los consumidores se les pregunta en la encuesta de percepción de ciencia que citen tres medios para estar informados sobre ciencia, el más citado es televisión. El problema viene cuando en la televisión se mueven muchos intereses y sólo sale lo que interesa a quien maneja ese canal en concreto. La mayoría de noticias, sin ir más lejos, cambian de enfoque dependiendo del canal donde las veas. Por lo tanto, también ocurre esto cuando se informa sobre ciencia. Habrá cosas que interese que se sepan y otras no. Por eso, veo complicado divulgar ciencia a través de televisión. Sí que es cierto que en muchas cadenas emiten documentales, donde se divulga sobre ciencia, pero también es cierto que los ciudadanos no suelen mostrar mucho interés en ese tipo de programas. Sería interesante dar con un formato más "comercial" de programa de divulgación científica en televisión. Sin embargo, creo que como a priori no vende, tampoco se hace el esfuerzo en sacar ese tipo de programas a la parrilla televisiva.
A modo de conclusión, creo que hay mucho por recorrer en el tema de divulgación científica. Parece que lo que no sale en la televisión no existe y, por ello, queda mucho por luchar y por que la ciencia se abra más hueco en el interés general ciudadano. Creo que Internet puede abrir muchas puertas pero hay que ser cautos en cómo usarlas.
Antes de hacer una pequeña reflexión sobre el tema, he consultado la encuesta de percepción social de la ciencia. Como dato significativo, me ha sorprendido gratamente cómo ha crecido el interés de la mujer por la ciencia entre 2014 y 2016, pasando de un 9.9% a un 13.7%. Por otro lado, como esperaba, la principal fuente de información científica de los ciudadanos es Internet (37.7%), sin embargo,es la televisión la fuente más consultada cuando los ciudadanos citan tres medios para estar informados sobre ciencia. Dentro de Internet, son las redes sociales la fuente más consultada (43.6%), y dentro de ellas es Facebook la más utilizada (40.9%).
Con estos datos de referencia quiero hacer mi reflexión. Como era de esperar, Internet es la principal fuente de información científica, pues es la más rápida de manejar y en ella puedes acceder a contenido de cualquier sitio del mundo de forma instantánea. Creo que gracias Internet, la divulgación científica es mucho más sencilla y los ciudadanos tienen mejor acceso a la información. Sin embargo, también creo que esto conlleva un problema. ¿Cómo saber cuando lo que leemos es fiable o no? En Internet, estamos constantemente expuestos a noticias, imágenes o datos. Dependiendo de dónde busquemos la información el enfoque puede ser uno u otro. Por eso, cuando leemos información científica también es complicado saber si realmente la fuente es fiable o hay algún interés oculto. ¿Es Internet entonces contraproducente para la divulgación científica? Por supuesto que no. Me posiciono totalmente a favor, pero si que creo que se debería formar un poco más al ciudadano y dar indicios de cuándo una fuente es fiable o no lo es. Además, creo que también se debería de controlar más el contenido publicado en la red, parece que todo es publicable en Internet, que todo vale, ¿por qué no endurecer las medidas de divulgar online?
Y paso de Internet a la televisión. Si me preocupaba algo Internet, creo que lo hace más la televisión. ¿Por qué? Cuando a los consumidores se les pregunta en la encuesta de percepción de ciencia que citen tres medios para estar informados sobre ciencia, el más citado es televisión. El problema viene cuando en la televisión se mueven muchos intereses y sólo sale lo que interesa a quien maneja ese canal en concreto. La mayoría de noticias, sin ir más lejos, cambian de enfoque dependiendo del canal donde las veas. Por lo tanto, también ocurre esto cuando se informa sobre ciencia. Habrá cosas que interese que se sepan y otras no. Por eso, veo complicado divulgar ciencia a través de televisión. Sí que es cierto que en muchas cadenas emiten documentales, donde se divulga sobre ciencia, pero también es cierto que los ciudadanos no suelen mostrar mucho interés en ese tipo de programas. Sería interesante dar con un formato más "comercial" de programa de divulgación científica en televisión. Sin embargo, creo que como a priori no vende, tampoco se hace el esfuerzo en sacar ese tipo de programas a la parrilla televisiva.
A modo de conclusión, creo que hay mucho por recorrer en el tema de divulgación científica. Parece que lo que no sale en la televisión no existe y, por ello, queda mucho por luchar y por que la ciencia se abra más hueco en el interés general ciudadano. Creo que Internet puede abrir muchas puertas pero hay que ser cautos en cómo usarlas.
En internet hay dudas sobre la fiabilidad del contenido, pero ¿dónde no? En TVE decía una presentadora que el limón cura el cáncer y no sé cuantas bobadas más, y en periódicos no digamos... No es tanto el medio como otras cosas. En el mismo periódico podemos encontrar una sección sobre el horóscopo y otra sobre ciencia (o economía) y no les damos la misma credibilidad. En internet creo que opasa un poco lo mismo, y que somos los consumidores los que tenemos que aprender dónde está lo confiable.
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